jueves, 16 de diciembre de 2010

Clouds.



Aún sin acabar de terminar esta semana, que encima ni fue semana, porque sólo van a ser 4 días; me relajo aquí un poco mientras escucho a Kate Havnevik (¿que no la conoces? Ya tardas).
Pasando por las interminables 24 horas en pie en aeropuertos y aviones; grandes emociones y grandes preocupaciones porque los americanos no entienden de peso average y sólo de peso por maleta. Y esto es un consejo: en Barajas puede que te pesen las 2 o 3 maletas que llevéis a la vez; en USA, como son más bien unineuronales, te pesan una a una. Si tienes que montar un espectáculo en el aeropuerto abriendo maletas, no te preocupes; te aseguro que no serás el/la único/a.
¡Mira, Obama!

Washington. Es de las ciudades que crees que te decepcionarán por su magnitud sin sentido y su mal gusto. Nada parecido. Ciudad con gusto, sabor y encanto. Manhattan seguramente pensaréis que es de las ciudades "con magnitud sin sentido", pero sin embargo, Manhattan tiene "gusto, gusto exquisito".

Véase esta foto desde el avión

Llegando a Madrid, sin dormir, con un sueño fuera de lo normal. En modo stand-by me dormí (refiriéndome a que me sostenía a mi misma pero aparte de eso, no me acuerdo qué hice, ni como llegué a mi habitación, ni nada); hasta que una voz gritando de casi 3 años, demandando regalos, me despertó y me levanté de mi cama como si ésta quemara. Veréis, en Miami tuvimos serios problemas con el equipaje más que nada porque no se le ocurrió otra cosa a mi madre que comprar un elefante en forma de caballo para un niño de 3 años. Le cogí cierta tirria al puto elefante; aunque con la alegría que se dio mi sobrina al verlo, el resto sobra.

Al día siguiente... Guao, sólo fue antes de ayer; fue uno de los más largos que recuerdo pero el que seguramente recuerde con más cariño.

Cuatro días que van a ser largos, vividos intensamente. Pero si no los vives así, ¿para qué esforzarte en vivir cómodamente?
Sino te arriesgas a pegarte una ostia contra el suelo, nunca sabrás lo que es estar entre nubes.

1 comentario:

  1. Te envidio, envidio poder viajar tanto, envidio tu vida intensa y por supuesto, envidio tu capacidad para arriesgarte

    ResponderEliminar